miércoles, enero 24, 2024

En situación de calle

 


He visto las entrevistas de personas que viven en situación de calle, es interesante saber la vida que tenían y porque es que renunciaron a la vida social normal y se unieron a esa nueva forma de ser y de vivir. Muchos de ellos lo perdieron todo por el alcoholismo algunos otros por causas de enfermedad mental y algunos otros simplemente porque se rindieron ante el peso de ser y existir. Dentro del núcleo familiar que me toco, vi casos de absoluto éxito donde pese a las circunstancias, salían adelante y formaban una vida cómoda con todos los beneficios que jornada de trabajo duro otorgan. Pero también me toco ver casos de familiares que perdidos en sus adicciones no les quedaba otra opción que vivir en la mendicidad. Es difícil verlos deteriorase, verlos caer en una vida sin más razón que la de irse dejando morir lentamente, desdibujándose en la anónima sombra que nadie quiere ver. Y pese a que el gran amor de la familia les otorga, ellos se rehúsan a aceptarla. Muchas de las veces creo que vivir de esa manera es un reproche justo a la fría sociedad que los rechaza a una sociedad que no les otorgó las herramientas necesarias para encontrar una ancla que les diera la estabilidad que ahora no tienen. Otras veces pienso que es un suicidio a largo plazo, saben que en esa forma de vivir o mas bien de seguir existiendo esta una muerte marcada en su proximidad por razones de enfermedades, resultado de su forma de vivir o por los peligros que la desnuda calle representa. Claro que también hay casos de gente que simplemente lo perdió todo por el despojo de los bancos, de amigos que los defraudaron o de negocios mal organizados que los llevaron a perderlo todo. casos así existen aquí en suiza, donde algunas personas viven de las ayudas de asistencia social, pese a haber tenido posiciones altas en puestos de gran importancia empresarial. Alguna vez en España vi una mujer que vivía en situación de calle de mediana edad, lo que me sorprendió, fue que a pesar de los harapos y la suciedad que la envolvía, lucia una belleza natural muy interesante. Lo mismo me paso en México cuando vi una mujer de un cuerpo muy bien formado que también vivía en situación de calle. Es difícil comprender que puede llevar a una persona a dejarlo todo, es decir su tranquilidad en un hogar, su laborar diario para mantener una vida que pueda ser vivida sin las inclemencias del clima asolando su existencia. Después se convierten en despojos sociales que solo causan molestia, que muchas de las veces son desaparecidos o violentados por aquellos un se les hace fácil lastimar a alguien a quien nadie más le importa ya. La lección mas potente de vida es que aquellas personas que han perdido un ser querido no es estar lamentando su perdida, es hacer algo con todo ese amor que aún queda, y si se mira en los ojos de quien lo ha perdido todo, ahí esta la persona que mas necesita ese amor que te sobra. Porque dejamos de sentir lastima, empatía, conmiseración por aquellos que sin saber la razón están a la buena voluntad de quien los quiera mirar, de quien los quiera de nuevo regresar a un mundo fallido en sus deseos y consumo, pero que solo se requiere de que muchos hagan lo que no quieren hacer los pocos