CITA CON UN ANGEL

Pasadas las 8:30 y con una plaza del zócalo esplendorosa por un lleno total y un publico impaciente que aplaudiendo y rechiflando esperaba la aparición del señor Silvio Rodríguez que fue antecedido por su grupo, que constaba de dos guitarras, un bajo, percusiones y una flautista con un intro bastante bella con un aire de música cubana muy sutil, pero que calmo los ánimos de los impacientes espectadores. Silvio apareció vestido como siempre de manera sencilla y cotidiana con una gorra deportiva azul en su cabeza y dedicando este concierto al dios Tlaloc y al respetable que esa noche se dio cita, se dispuso a cantar canciones de su nueva producción “ cita con ángeles” con canciones muy bellas reflejando la madurez espiritual de Silvio. Cosa rara de Silvio que casi nunca da explicaciones del por que de su música o el contenido de sus canciones, en ese momento Silvio comenzó a contar una pequeña historia o anécdota de algunas de las nuevas y de las viejas canciones. era imposible no poder corear las canciones que poco a poco llenaban el zócalo de la ciudad, acompañadas por arreglos diferentes a los ya escuchados a los discos. durante mas de 3 horas Silvio canto gran parte de su repertorio conocido y también nos sorprendió con una que otra canción inédita que según adelanto, será parte de su nueva producción discográfica y que incluirá a aquellas canciones que se han quedado guardadas ya hace muchos años, obviamente con la belleza que representa una obra de Silvio. Fue para mi muy emotivo escuchar canciones en vivo tales como playa jirón, casiopea, Sinhue , requiem,pequeña serenata diurna,unicornio, ojalà, la caciòn del elegido, así como la sorpresiva y rápida presentación de Fernando Delgadillo que deleito a todos con una canción inédita sobre unos ojos verdes y su éxito de siempre ”hoy hace un buen día”
Silvio siempre será el representante más sorprendente de la nueva trova, con un poder de convocatoria fenomenal que dejo claro desde ya hace algunos años en el monumento a la revolución.
Silvio es un fenómeno cultural sorprendente y al ver tanta gente llorando con un sentimiento de saberse parte de esa magia que encierra el señor Rodríguez, me doy cuenta que el pueblo Mexicano tiene redención y sale de ese cliché de pueblo consumista telenovelero y amante del fútbol y deja salir esa parte que ojalá si se pueda seguir, tocando hasta en canciones.
Armando Vega.