Cuando veo una larga
fila de idiotas esperando por un café con un sobreprecio, pero que el valor de
la marca los a manipulado para sentirse que son algo mejor de lo que pretenden
ser, me pongo a reflexionar en cómo es que llegamos a ese irracional comportamiento.
Peor aún, cuando la fila es para comprar un teléfono que será obsoleto en
cuanto salgas de la tienda.
Pero la cosa no
termina ahí, porque ahora hay que hacer fila hasta para estar en el paraje más
solitario, el cual es la cima del mundo, claro para una mente pequeña que así
lo considere.
Esto en relación a
una foto que salió en todos los periódicos de circulación corriente, donde se
observa un grupo de 200 escaladores que hacen fila para tomarse la selfie en la
cima del monte Everest.
¿Es culpa de mentes
vacías y carentes de sentido creer que son algo especial? rodeados de idiotas
que se consideran así mismos únicos y especiales.
Comprendamos que
idiota es el enajenado que está obnubilado, carente de pensamiento crítico o
racional.
¿Es culpa del
sistema de consumo obsolescente? que ha creado estos monstruos consumistas y
narcisistas, que buscan por todos los medios aprobación en la mirada ajena.
Es claro que somos
vehículos de genes que quieren evolucionar, que quieren escapar a las estrellas
y asi seamos víctimas de esos genes egoístas, que nos obligan a ir más lejos,
un paso más allá de nuestras capacidades con el fin de evolucionar y lograr lo
que el genoma tanto anhela, adaptarse tan bien al medio hostil que pueda ser
eterno.
Pero no me salgas
con que es el sueño de tu vida subir una montaña en busca de realización, no me
salgas con la idiotez de que un hijo o un amor o el dinero te dará paz y
estabilidad, que consolidar tus pequeños sueños y te darán la felicidad que
tanto anhelas.
No solo eres víctima de la evolución selectiva
que dicta tus decisiones, que maneja tus pasos como una marioneta. porque una
ave migratoria no puede ir en contra de la orden instintiva que la obliga a ir
a donde tal vez no desea ir, pero que algo dentro de ella la obliga a ir,
aunque su decisión sea morir por no obedecer su instinto.
De esos 200 idiotas
que hacían fila en el Everest hasta el momento van 8 muertos, que por
agotamiento y falta de tanques de oxigeno no pudieron más y sucumbieron.
lo más cómico son
las declaraciones de los familiares de estos idiotas muertos, que al final
ellos se fueron en paz, estaban felices, porque murieron "cumpliendo sus
sueños" y lucharon por sus ideales.
Si tan solo salieras
de tu estupidez hermanada, confabulada, si tan solo cuestionaras un poco lo
irracional de tus actos, si pusieras toda esa energía en comprender que
alimenta tus sueños y motivaciones, tal vez dejarías de ser víctima de
ridículas muestras de estupidez, como los viajes de conocimiento y meditación a
tierras orientales, dónde vendrá un camión para llevar cientos de turistas
consumistas que buscan una experiencia mística en la India o en Tailandia.
O esos jóvenes
mochileros aventureros, que buscan islas
paradisíacas en panfletos que así lo ofrecen, pero sólo tendrán un spring
break, lleno de alcohol y drogas, absolutamente comercial y lleno de todo lo
que buscas alejarte de primera instancia.
Pero así seguirán
los idiotas monos mal llamados "sapiens" abarrotando y contaminando
las playas en días feriados, buscando paz y tranquilidad, y obteniendo
exactamente lo contrario.
Así seguirán estos
pobre idiotas, siendo víctimas del consumo, de los medios de comunicación, de
las mal intencionadas corporaciones y gobiernos que se aprovecharan de su falta
de criterio, y al final solo serán víctimas de sus genes que los impulsarán a
ser osados, únicos, aventureros, arriesgados, valientes en busca de esa
felicidad que está arriba en una montaña en lo más profundo del mar o en el
nuevo auto o teléfono inteligente.