la sabia virtud de la paciencia es darle su tiempo y ritmo a las cosas, los que somos músicos aunque sea de silbido lo sabemos muy bien.
el tiempo que con paciencia damos a escuchar, a entender, a dejar que los ritmos fluyan, dependen del entendimiento de la esencia misma de la vida.
los zafios, palerdos, que pululan en el mundo buscan que todo sea ahora y ya mismo. muchas personas llaman a diario al servicio técnico de las computadoras porque el aparato que compraron no prende y que como televisores deberían encender a la primera, sin tener en consideración que primero hay que ubicar el botón de encendido, antes de llamar a dicho servicio.
la paciencia es la virtud que da forma a todas las cosas,es la que transforma todas las cosas, en lo que soñamos que se transformen alguna vez.
el populacho, la plebe vive del ya, entre mas rápido mejor. no conozco un chef o un cocinero famoso que lo sea por lo rápido de sus platillos, si no por lo delicado y cuidadoso en su obra de arte culinaria.
pero los estúpidos, los vacíos, los inútiles sacos de carne, siempre van a estar tocando una bocina de su auto en cuanto la luz se ponga verde, siempre van a hacer fila en cinepolis aun cuando su asiento es numerado, siempre van a formarse en la salida de su vuelo aun cuando es por secciones y los tengan que mandar a la chingada con una sonrisa, siempre van a buscar el beso pasional en la primera cita o mejor aun el hotelazo antes que el amor o el romance,siempre es mas importante ir hablando por celular mientras manejas a su seguridad o la de los demás, siempre estarán casi encima de ti en cualquier fila, ya sea de un banco, un cajero, un pago automático del estacionamiento, como si su respiración en tu nuca precipitara los eventos por venir.
la paciencia es una virtud que estos hijos de la chingada que me rodean a diario ponen a prueba cada segundo y fallo una vez mas en mi calma y paz espiritual porque solo un Buda o un iluminado podría vivir en esta ciudad, pasando por alto y con una sonrisa, tantas mamadas de estos malditos monos lampiños y desnudos.
yo como no soy un Buda, ni soy iluminado, con todo mi amor vayan y rechinguen a su puta madre, desesperados hijos de mierda y que la prisa que buscan los alcance con una muy pronta muerte prematura.
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