domingo, junio 21, 2009

DESPIERTA
Simplemente no puedo permitir que un ser involucionado tome mando de mis decisiones, de mis miedos, de mis planes futuros, presentes o pasados.
No puedo permitirme dejarme guiar por un partido político o por un dirigente político o religioso que solo vela por sus propios intereses o por los de gente que solo cuida los propios intereses personales.
Ya me lo dijo un jefe de manzana corrupto en un afán de falsa y orgullosa vanidad. Tan solo con la construcción de un portón eléctrico, por el bien de la manzana que pretendían cerrar su calle, se embolso 50 mil pesos Mexicanos, solo con un juego de notas alteradas.
No puedo imaginar las groseras cantidades de dinero del erario público que se roban nuestros amados dirigentes.
Simplemente no puedo permitir que un ser involucionado tome partido de mi voto, de mis oraciones, de mi tiempo, desperdiciado tan solo para darle oportunidad de robar a estos desgraciados políticos y sacerdotes, víctimas de un sistema corrupto y un conjunto de ideales bizarros de lo que es la felicidad y el bien personal.
La historia lo deja muy claro, desde los prehistóricos cavernícolas, hasta los griegos y los romanos. El poder absoluto, corrompe absolutamente.
Es bien sabido que los políticos y sacerdotes sirven no al pueblo si no a conveniencias y poderes más altos a eso que los patrocinan y ponen en el poder.
Mientras no exista un hombre revolucionado así mismo por derecho, con un despertar de conciencia capaz de entender que el bienestar del todo es la esencia de uno, que entienda que el mal que cometo para otro es lo que me hago a mi mismo, mientras no se entienda esto con sabiduría, no pudo permitirme sentirme representado o darle la categoría de líder a un lerdo analfabeta que jamás cuidara los intereses de quien representa.
Ninguna revolución, ninguna independencia, ningún cambio heroico nos ha dejado nada bueno, solo libros llenos de mentiras de historia endiosada, reinventada a complacencia y beneficio de quien resulta ganador.
Todos aquellos laureados héroes fueron mentirosos vende patrias, asesinos y egoísta enfermos de poder y sed de sangre llámese Juárez, Hidalgo, Morelos, Villa Zapata y toda esa bola de superhéroes inflados y tan verdaderos como los de comics ilustrados.
La solución no está en poner otro pendejo al mando de mis sueños e ideales.
La verdadera revolución es revolucionarse, cambia tú y el mundo cambiara contigo.
Cuando entiendas que tu controlas la mierda que televisa te manda, cuando entiendas que tu controlas el destino de tu tan amada selección de futbol ¿Cómo? tu eres lo más valioso, eres el anhelado rating, que hace que puedan vender publicidad. Sin tu atención puesta en esa mierda, se les caerán los calzones a los que te toman por una mascota del sistema.
Tú controlas los políticos que tienes, sin tus impuestos y contribuciones son nada. Tú controlas a tus sacerdotes pederastas, narcos y violadores. Cuando entiendas que dios no está en estatuas muertas de yeso ni en templos de oro y piedra, ni en miedos de infiernos y castigos, No existen. Nunca dios invento jamás el sacerdocio, ni las misas, ni bautizos, ni matrimonios, solo son pretexto de esos rateros enfermos de poder para venderte una ilusión.
Piensa, revoluciónate, cuestiona, reinvéntate, solo así se cambia el mundo. El único que decide qué camino tomar eres tú.
Basta de héroes, mártires y demás pendejos que se mueren y dan la vida por un ideal que nunca alcanzaran, deja las armas, deja los machetes, baja esas estúpidas pancartas y encuentra el mundo, busca las cabezas más altas a los libres pensadores, renuncia al apego y al ego, entrena tu cerebro y tu cuerpo. Toda la verdad no está en los libros, esta en un camino que tenga corazón, pero no tienes derecho a entenderlo hasta que hallas leído más de 20 años en busca de respuestas, después bórralo todo, olvida todas esa sarta de idioteces y encuentra tu verdad.
Solo es mi manera de ver cómo poner las cosa en orden en esta sociedad corrupta y corrompida. Si tienes una propuesta mejor mi mente es receptiva y curiosa a saberlo.
Armando vega González.
armando_vega@terra.com.mx