Una cosa que e aprendido de la vida, es a no decir nunca, ya que es una palabra muy peligrosa, en mis días de poca conciencia de esta palabra, la repetía con entero desacato de saberla segura, pero en realidad, la vida me puso en su lugar como es debido, así es que por tal motivo y razón me e mostrado mas abierto a la vida y a las posibilidades, y me dejo llevar concienzudamente con el paso de los acontecimientos; de la misma manera también la palabra siempre es una peligrosa aseveración, ya que no es posible saber como es que se acomoden las piezas del ajedrez para conocer el destino final de lo que sucede en nuestros días, por eso es que me comprometo ahora mas con mis palabras, para no tener que tragármelas como tantas veces sucedió, aprendo con lo días y de las caídas, para no dar por echo nada y esperar de la vida todo.