Dese hace mucho,
tanto, que incluso los griegos ya lo sabían y escribían al respecto. El medio
ambiente y los alimentos que consumimos dan como resultado lo que somos, lo que
pensamos y en general el funcionamiento total de la sociedad.
Es claro que el
medio ambiente sufre una contaminación como no se había visto en la sociedad
moderna, y esta contaminación no sólo se ve reflejada en la basura o la
polución, se ve también en el comportamiento humano, su desinterés y
consumismo. Esto es un problema que lo supera y lo rodea, aunque no lo perciba
y peor aún,no lo sienta como una urgente
contingencia a resolver.
Y no sólo nos afecta
como esta demostrado en la salud y las enfermedades crónicas que se están
incrementando, también nos afecta en los procesos cognitivos, porque la
contaminación en aire, agua y alimentos están haciendo que las personas en
general bajen sus niveles de inteligencia y atención, lo que provoca no sólo
que nuestras decisiones se vean afectadas en un porcentaje importante. Y esto
no sólo trae como consecuencia una falta de ganas de saber o aprender, genera
un sin número de actividades diarias hechas mal. Porque la gente idiota ya no
sólo lo es por manejar y hablar o revisar sus redes sociales mientras conduce,
también lo es porque ya no reacciona tan eficazmente a una toma de decisiones
correcta.
Y ¿que pasa cuando
esta persona idiota o disminuido mental maneja un avión o es tu médico familiar
o es el presidente de tu país? La cantidad de quejas por negligencia en todo
tipo de servicios o funciones mal realizadas incremento exponencialmente cada año.
Entonces, no creas
que porque una persona se desempeñe como un profesional en su materia tiene
porque serlo o será infalible en su diagnóstico y servicio. Aquí en Suiza donde
me toca vivir por el momento, me es increíble la cantidad de errores de supuestos
profesionales que me a tocado presenciar, y ya no creo que sea simplemente
porque la gente es negligente, creo que ya tiene que ver con una característica
fundamental en sus organismos causada por la contaminación.
Hay que tenerle
miedo a los pendejos, hoy más que nunca, porque ya no sólo son una masa
gigantesca de animales que a desbordado la civilización moderna con sus actos
llenos de una barbarie e idiotez, si no que ahora son los que preparan tus
alimentos, manejan los trenes, autobuses y te dan atención en servicios
profesionales en los cuales confías ciegamente porque estas en iguales
condiciones de sopor mental.
Desgraciadamente, ya
ni el ejercicio, ni la sana alimentación nos librará del problema, porque está
contaminación está en todo lo que respiramos, está en todo lo que bebemos y los
estragos de esto son acumulativos. Todo el plástico que tiramos al mar se está
descomponiendo en micro partículas, que ya está dentro de todos los seres
vivos, y aún no sabemos qué será la consecuencia que esto conllevará a la
larga.
Una vez más los
eventos y catástrofes naturales rompieron récords de destrucción y muerte en
todo el mundo. las consecuencias del cambio climático son aterradoras, las
víctimas las vemos implorar a un dios ciego, sordo y mudo mientras las vemos
quemarse vivas como en los incendios de California o las vemos ahogarse como en
los tifones de Japón.
Mientras tanto el
consumismo también rompe récords de ventas y la gente es absolutamente
insensible a la muerte y destrucción que lo rodea, y que ese círculo se está
cerrando, atrapando a los que se sienten a salvo en una situación ya no de
suerte si no de cuando, porque salir a la calle ya se ha convertido en una
ruleta rusa, donde estamos jugándonos la vida ante tantos idiotas que mueven
una maquina asesina de 4 toneladas con su cerebro adormecido por tanta azúcar,
por tanta grasa saturada y tanta contaminación acumulada en su organismo.
Las olas de calor
seguirán matando miles cada año, las sequías destruirán pueblos y comunidades
enteras, la muerte de insectos y demás agentes
polinizadores crearan hambruna como nunca se vio en esta humanidad, los tifones,
huracanes, inundaciones por lluvias y fríos extremos mataran todo lo que quede
por arrasar.
A continuación
sarcasmo.
Mientras tanto, tu
siente seguro en la comodidad de tu pendejez, sigue mirando tu teléfono
inteligente para gente idiota, pensando en la siguiente cosa que te has de
comprar, en el próximo auto que manejaras y tu futuro idílico, donde
disfrutaras un futuro asegurado y una vejez tranquila, porque eso es el fruto
del trabajo tan arduo que realizaste.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario