Una vez más tocó el tema de la justicia. ¿Es real? Ante tanta impunidad¿podría decirse que algún vez se hará justicia, por tantos actos de podredumbre humana que vemos en cada momento que a dado la civilización humana? A razón de los signos de su verdadera naturaleza.
Cuando siento en carne propia la estupidez humana en toda su expresión, de aquellos suizos que en los transportes públicos no quieren usar cubre bocas aunque es obligatorio y con pena de multa económica o cundo veo a todos aquellos suizos que manejan como estúpidos viendo su teléfono creyendo que en su idiota cabeza pueden controlar esas 4 toneladas sin riesgo ni peligro, aún que no presten atención.
Y así, siempre hay una muestra de la falta de empatía y congruencia cívica en todas partes y en todo lugar, porqué el humano no importa de qué país sea, es y siempre será un mono empoderado.
Y si lo vemos a grandes males, no acabaríamos de describir las injusticias sociales que acarrea la ambición y la necesidad egoísta de poseer más, sin la importancia de la esencia del ser. Todas esas instituciones corruptas como la ONU, la FIFA, la OMS y demás instituciones que solo están de tapadera y solapan intereses ajenos a los que dicen representar.
Y para colmo todas esas chingaderas corruptas están en el país más corrupto que es Suiza, la alcancía y paraíso de los ricos y corruptos.
Ahora veamos pues, la realidad de un personaje que le parece divertido encender su motocicleta en una urbanización a las 2 de la madrugada, porque se siente poderoso y muy cabrón, y como la policía aquí en suiza se duerme a las 9 de la noche en punto, pues no hay control y hay una total impunidad.
Dentro de la cabeza de ese personaje hay una necesidad de atención, unas ganas de decirle al mundo existo y me siento perdido, y como no sabe expresar sus emociones y nadie le a explicado cómo salir de esa mierda interna, lo único que encuentra como consuelo es manifestar su ira y enojo ante una sociedad que le a fallado y que en su perspectiva le debe mucho, por todo aquello que ha perdido como ser humano.
Ese personaje buscará tatuajes en todo su cuerpo que le reiteren una identidad perdida, porque al carecer de personalidad buscará por todos los medios representación. Buscará las drogas como escape de una realidad que odia y de la cual siempre estará en huida y evasión.
Entonces ¿hay impunidad? Claro que no, porque esa persona tiene que vivir el castigo diario de ser ese mínimo ser. Vive la condena de ser un estupido, un pobre ser humano encerrado dentro de su propio enemigo.
La causa son ellos y el efecto es el reflejo de sus vidas materialistas y superficiales, llenos de lágrimas, dolor, ira y una constelación de males que tratan de maquillar y disfrazar de éxito y competencia.
Entonces, si hay justicia y equilibrio en la vida, porque no hay ningún ser humano que escape a lo que el mismo se construyó.
Pero ojo, porque esos humanos débiles y dormidos en su narcisismo y egoísmo son los que construyen la sociedad en la que vivimos y esos arrancones y esas bolsas de basura en la calle de los insensibles, también son nuestro castigo por no saber ser respuesta a su dolor. Al ser ciegos a las causas que anteceden esas conductas somos partícipes de que continúen.
Al encontrar una respuesta correcta en nuestras vidas, al ser más empáticos y asertivos, al darnos calidad en lo que consumimos en alimentos y cultura estamos siendo el cambio que queremos para el mundo.
Si cada día vemos más corrupción, más enojo, más basura comercial y musical es porque no sabemos ser críticos con lo que está mal, bajo, barato y chafa. Porque no somos exigentes con nosotros mismos y con lo que nos rodea es que al final tenemos la sociedad y los políticos que nos merecemos.
No, nadie sale impune, porque somos un conjunto y eso no lo entendemos ni lo queremos entender. Porque el político que hace sus corruptelas cree que nadie lo atrapará, pero esas corrupción es la bota que tarde o temprano lo aplastará, porque una pizca de corrupción tarde que temprano le llegará en algún servicio que pida y le salga mal, en algún médico que también sea corrupto como el, en algún mecánico que sea corrupto como el, porque la justicia es poética y todos aquellos que ya creyeron salirse con la suya vivirán una vida de miedo y soledad como es claro que esas almas perdidas tienen como destino.
Mi amor por la buena música es contagiosa, mi amor por la buena literatura es contagiosa, mi amor por el buen cine es contagioso, porque al escuchar el amor que tengo por tal o cual realidad que me absorbe, que me absorta, antojo a los demás a asomarse por ese camino, en ningún momento los obligo a ver mis gustos o realidad como una verdad, pero si los contagio del amor que una obra de arte me inspira y si eso es suficiente para que despierte tu curiosidad entonces mi vida tiene sentido y esta completa.
Para que en realidad termine la impunidad debes poner todo tu amor al servicio de los demás, en tu trabajo diario, en tu amor propio, en tu necesidad de mejorar, porque la corrupción terminará cuando ya no la aceptes, cuando te dé vergüenza cualquier acto impío, cuando te niegues a ser partícipe y cómplice de una sociedad en declive.
armando_vega@icloud.com
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