Divagando

Fernando vallejo, autor de la virgen de los sicarios, asegura que nuestro prójimo son también los animales, que la política está lleno de corruptos, serviles así mismos y que el poder ya sea en la religión o la política solo sirve para beneficio del que lo tiene o ejerce.
En empatía con sus afirmaciones plasmo mis propias ideas y proclamo como prójimo todo lo que me rodea, porque aun fuera de que tenga un sistema nervioso o no, todo es energía, luz solidificada. ya sea vegetal, mineral o animal todo es parte de los mismos átomos que me constituyen. así entendiendo al gran filósofo santo Asís inclusive me quito piadoso las sandalias para no lastimar a las piedras del camino.
Creo también como el, que la política es una mierda llena de sus propios vicios y sustentada por la mediocridad del ser humano, pero no la niego como una herramienta indispensable de la sociedad, para estos monos mal llamados sapiens.
no es su culpa, tienen dentro de sus sistema o paquete básico la necesidad de ser estafados engañados y gustan de vivir de la esperanza y promesas o mesías por venir.
Estos monos necesitan del futbol, de la política, de la virgencita y demás cosas que los mantenga quietos o menos peores estando de ociosos.
La religión
La religión para la humanidad se resume en esta frase “un hombre sin religión es como un pez sin bicicleta” una sarta de dogmas, palabras muertas y estupideces que dejan al peor de lo idiotas sonrojado. Había un tiempo en el que el bueno era bueno, el malo era malo pero la única cosa que hace que un hombre bueno se transforme en malo es la religión.
La ignorancia no de conocimientos, si no una ignorancia espiritual, que más que ignorancia llamaría vacío o hambre de dios es lo que hace que la gente se sume a cultos que le cuenten cuentos, que le revelen la manera de llenar esos vacíos.
Una vez más proclamo que la religión, la política y la visión de una vida de consumo sustentan mi sociedad, pero no la culpo, porque gracias a eso es que vivo en un mundo, si se le puede llamar así “civilizado” entiendo el equilibrio de las cosas y que quien quiera vivir en la ignorancia o promesas de paraísos o gobiernos mejores, pues que con su pan se lo coma.
No pierdo el tiempo en ver votaciones o comicios electorales, ni pierdo el tiempo en saber que dios es el bueno o comiendo que o cuando ya me condene, estos monos le son necesarios ídolos y promesas y está bien, como lo dije en mi canción soberano de gusanos “lo bueno es que contigo tus dioses morirán” así como tus construcciones tus templos y demás.
De alguna manera me consuela saber que en 2 millones de años no habrá una sola prueba de que existió la humanidad. por lo mientras vivo y dejo vivir y busco lo mejor de Dios en mi, para no necesitarlo nunca más.
Armando Vega presente.
Pongo un poema que resume lo más alto de la conciencia humana y que resulta utópico porque aún no ha nacido un ser humano con esa visión.


Cuando sepas hallar una sonrisa
en la gota sutil que se rezuma
de las porosas piedras, en la bruma,
en el sol, en el ave y en la brisa;
cuando nada a tus ojos quede inerte,
ni informe, ni incoloro, ni lejano,
y penetres la vida y el arcano
del silencio, las sombras y la muerte;
cuando tiendas la vista a los diversos
rumbos del cosmos, y tu esfuerzo propio
sea como potente microscopio
que va hallando invisibles universos,
entonces en las flamas de la hoguera
de un amor infinito y sobrehumano,
como el santo de Asís, dirás hermano
al árbol, al celaje y a la fiera.
Sentirás en la inmensa muchedumbre
de seres y cosas tu ser mismo;
serás todo pavor con el abismo
y serás todo orgullo con la cumbre.
Sacudirá tu amor el polvo infecto
que macula el blancor de la azucena,
bendecirás las imágenes de arena
y adorarás el vuelo del insecto;
y besarás el garfio del espino
y el sedeño ropaje de las dalias...
Y quitarás piadoso tus sandalias
por no herir las piedras del camino.

ENRIQUE GONZALEZ MARTINEZ