sábado, junio 09, 2012

Monos y sus monerías


Me gusta de cierta manera vivir en D.F. su caos, su estrés cotidiano, es como un torbellino de culturas diferentes pero con el mismo aspecto y religión.
Me gusta porque sus mediocres habitantes (con todo respeto pero es lo que son, hasta que demuestren lo contrario) dado el estigma de la conquista siempre,agachan la cabeza ante lo desconocido, ante lo diferente y sabiendo esa conducta pues ando como pez en el agua. Son miedosos de todo pero contradictorios, de enfermarse, pero tragan de todo,de perder su vida, pero no viven en absoluto, de perder su trabajo, pero odian lo que hacen. de no ser tan patéticos serian chistosos.
A diferencia de otros países en df te temen y se ocultan se hacen a un lado cobardemente, pero en diferentes latitudes y ciudades modernas los otros, europeos y americanos del norte son miedosos pero de una manera mas agresiva, temen por su vida y por eso compran armas como Rambo o en su defecto recurren insistentemente a la policía, temen por su salud y abarrotan su cuerpo de medicina, como si fueran dulces, pagan seguro para todo y se liberan del estrés de vacaciones en países exóticos, pero solo en resorts donde solo verán a los habitantes de las regiones a las que van como empleados serviles, en general tienen mas estrés pero mas terapeutas felice$,mas control de todo y de todos y ven al extranjero como invasor, que busca robarles lo que creen que por derecho les pertenece, pero en su estúpida ignorancia no saben que sus ancestros algún día también fueron invasores y extranjeros.
Nunca me detuvieron tantos policías de tránsito como en España 17 veces en un mes, si salía a caminar por las calles de la Columbia británica en sus privadas siempre a los 15 minutos tenía una patrulla que me pedía mis documentos, no había restaurante en Berlín donde faltara una mirada nerviosa o curiosa por mi presencia, en cada control de seguridad de aeropuerto siempre tenía yo mas tiempo, mas preguntas y mas exigencias de seguridad que el promedio, en Canadá me detuvieron por 5 horas y me revisan hasta con un perro anti drogas.
En general me gusta México no por patriótico, ni nacionalista si no por que me siento un poquito mas cómodo entre sus miedosos habitantes, que los paranoicos miedosos de otras regiones y países. En general en cualquier sitio estos monos sapiens son lo mismo, me son ajenos y me divierten sus monerías su estrés no me inmuta,su paranoia no me afecta, sus miedos no me impregnan.
me quieren demarcar territorios, impuestos,multas,discriminaciones control pues bienvenido sea, no me enojare por sus estupidez, por sus actitudes, estando yo mas alto, muy por encima de sus emociones animales,si un perro me ladra por estar en su árbol favorito o un pavo real me quiere intimidar esponjando su plumaje,mas animal seria yo si me molestara.
Así es que monos, mal llamados sapiens,salten en sus ramas que tanto cuidan aman y protegen, golpeen sus pectorales rebosantes de testosterona, dancen alrededor de sus monas alzando los brazos,arrojen excremento mostrando su "superioridad" que por mi parte yo estaré solo curioso y muchas veces divertido de sus monerías,atento por si acaso, pero muy lejos de sentirme identificado con su comportamiento animal.



armando_vega@terra.com.mx

No hay comentarios.: