Actualmente se trae mucho el tema de los FANIS, fenómenos anómalos no identificados, más con las declaraciones juradas de pilotos y altos mandos del ejército gringo, aunque se les olvida que gobiernos como el de Brasil, el de España o México, ya hablan sin esconder nada desde hace años, incluso grandes políticos de América en general, hablan del tema sin miedo a la ridiculización, y más aún, el que grandes científicos estén hablando abiertamente del tema, con una mente abierta.
Muchas personas han tenido encuentros curiosos con estos fenómenos anómalos la mayoría de las veces son confusiones con aviones, con satélites artificiales, con planetas o hasta la luna, pero hay casos en los que los eventos no se pueden explicar y es cuando caen en la categoría de los OVNIS o Los FANIS como se les dice ahora.
Mi madre algún día cuando regresaba de la fiesta con los amigos vieron un objeto con forma de disco que tenía las clásicas ventanas que giraban con luces estroboscópicas y que de posar unos instantes quieto en el basto cielo, se abalanzo de súbito a las estrellas a una velocidad vertiginosa.
Cuando tenía tres años de edad tengo un recuerdo muy vivido de ver mi habitación iluminada de luces neón y de pequeños seres que rodeaban mi cama y tenía la imagen de una mujer como la maja desnuda que me observaba desde una pintura al óleo con movimiento, fue muy curioso, porque para una mente infantil esas cosas se confunden entre sueños recuerdos y fantasías, pero en mi memoria es un recuerdo muy curioso.
También a los 5 años tengo el recuerdo de haber visto entrar a mi habitación a un ser de luz, como si fuera una figura de una sombra inversa, lo recuerdo verlo entrar y salir, caminando sin ninguna interacción, tan solo un suceso muy interesante e increíble.
El evento que me dio la gran curiosidad para leer y buscar más información sobre el tema fue el programa de 60 minutos donde un joven Jaime Musssan hablada desde una postura periodística del caso de Billy Meyer, un caso muy polémico que ha perdido prestigio y credibilidad con el paso de los años, pero que en su momento me dio la llave de entrada a ese mundo de casos anómalos.
Años más tarde compre un libro de Tomas Doreste muy bien documentado y explicado con mucha seriedad sobre todos los casos que se remontaban desde suiza de la edad media o los avistamientos en las carabelas de colon o las campiñas inglesas del siglo XVIII, lo que más me sorprendía era que con casos históricos tan detallados, se hable que el tema como si este comenzó por ahí de la época de los 40´s, cuando se sabe que avistamientos ha habido desde las crónicas napoleónicas hasta los jeroglíficos egipcios.
Aunque me la paso mirando al cielo desde esos entonces puedo decir que solo una vez cuando tenía unos 9 años vi un disco con ventanas y girando como lo verías en las películas de platillos voladores, además de que lo vi a plena luz del día, el problema es que tengo una mente muy crítica a pesar de que leo sobre estos temas y veo muchos programas de radio y televisión que hablan sobre el tema, por eso cuando lo vi fue tan chafa en lo que respecta a las ventanitas, el giro sobre su eje, el bamboleo de Frisby, que pensé que sería el anuncio de un circo o algún helicóptero disfrazado.
Con los años de observar el cielo solo me ha tocado ver pequeñas luces como estrellas y algunas puntas de alfiler que se mantiene estáticas pero nada dramático, ni tan increíble como lo que vi cuando era niño, y cuando al fin compre mi cámara telescópica Nikon Cool pix 900, cualquier atisbo de encuentro misterioso desapareció, ya han pasado años y aunque sigo mirando el cielo no hay nada en ellos anómalo que haya podido captar con mi cámara.
Hay gente que cuando les cuento mi experiencia me dicen que soy creyente de los platos voladores, y les respondo, no, yo soy receptivo a las pruebas y demostraciones
de eventos anómalos, pero yo no creo, yo cuestiono y me baso en las evidencias para expresar una opinión. No puedo decir que eso objetos son naves de otro planeta, aunque se ha recuperado sus restos y en los análisis se demuestra que son materiales y tecnologías ajenos a nuestra realidad, pero mientras no existan pruebas concluyentes, todo se mantendrá como una hipótesis muy curiosa.
Veo con emoción que por fin los gringos hablan abiertamente del tema y las pruebas oficiales de máquinas militares que los captan en movimientos imposibles para la física convencional, hacen que los grandes científicos tengan curiosidad de ver que es lo que esas máquinas están captando, y así, poder dar posibles explicaciones a lo que surca los cielos, y que lo ha hecho por miles de años, según las crónicas y registros ancestrales.
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