Fueron rescatados de una playa desierta un par de náufragos(cuenta el bulo) que después de haber perdido toda esperanza, pusieron con piedras el mítico mensaje S.O.S en la paya de ese recóndito lugar perdido en la inmensidad del océano. Ninguna ruta comercial naval o aérea, por mala de su suerte recorre esos lares.
Pero uno de ellos el optimista y el soñador, debe de ser,quiso tentar la suerte con un mensaje, que sabe dios quién podría descubrir, pero así fue. Google earth fue la herramienta para que un curioso diera con la aguja en el pajar y la historia tuviera una conclusión increíble y asombrosa en sí misma.
Recuerdo que un pedazo de canción que no puede bajar bien, me llevó a un amigo, que algún día me abrió las puertas de su casa y corazón. Recuerdo que en algún viaje de Silvio Rodríguez, tu música lo acompañó y le despertó la curiosidad de quién era ese que le sonó parecido a otro que no era en realidad. Recuerdo que tu música fue escuchada al cierre de un antro perdido en León, ante el beneplácito y desconcierto de uno que otro solitario que se retiraba de aquel lugar ante la inminencia de las luces que se encendían.
Recuerdo esa estación de autobuses que fue escenario de un improvisado concierto, no realizado donde originalmente debía, por causas y azares del destino, y donde Aldanai erizo mi piel y aún al recordarlo lo sigue haciendo.
Recuerdo ese viaje en 2004 a Puerto Vallarta donde tu música no dejaba de sonar en mi vieja laptop y que en un sopor de mariguana y alcohol, nos derrumbo a mi amigo y a mí por la soledad que en ese día nos aquejó, y que tu música intensificó con más ahínco las lágrimas, mucho más de lo que sospechamos.
A veces lo que queremos no es lo que tenemos. A veces lo que soñamos se cumple, no precisamente como lo idealizamos.
A veces dejar mensajes sin esperanza, son las puertas que abrirán tantas expectativas, que variarán en que nos rescaten o que nos salven o que salven una vida o que condenen a otra.
Dejar de escribir por falta de lectores, por falta de público constante, no precisamente callara lo que tengas que decir y expresar, pero el mensaje, solo será posible de transmitir siempre que lo hagas saber.
Dejar de soñar, por la falta de sueños cumplidos, no termina con los soñadores, por lo cual aún sin sueños cumplidos, no dejes de soñar.
Dejar de darle al mundo canciones, parece que no importa tanto, pero en algún momento hay que pensar fuera del ego personal y dejar que surja,que brote la canción, y que sea ella quien decida su voz y su destino.
¿Quien? pudiendo saciar la sed le niega agua al sediento.
¿Quien? pudiendo traer la luz la oculta.
¿Quién teniendo que decir calla y sabiendo que contar omite?
¿Quién teniendo una canción atorada en el alma la deja morir en el silencio?
¿Quién?
armando_vega@icloud.com
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