Lo que realmente me
derrumbo, no fue el vacío
de las sabanas lejos ya de tu calor y tu sonrisa de mañana, no fue verte con la decisión férrea de tu partida, tan pronta y
repentina, no fue verte en el quicio de la puerta con las maletas dispuestas,
mientras la luz que entraba por el resquicio arrebataba la última imagen de tu figura en mi
memoria.
Lo que realmente me
derrumbo, fue que al regresar de nuevo a casa, tu aroma a frescas flores de
mayo estaba aferrada y perpetuamente impregnada a cada cosa, ropa, taza, mueble
de esta vacíahabitación lejos de tu presencia.
Entrar y
encontrarme tan pronto contigo me
desarmo por completo y por fin mis lágrimas abandonaron mis ojos, para ser
de ti como siempre.
Me aferre a las
sabanas que aun guardan el contorno de tu figura y me hundí en un sopor de melancolía, donde me preguntaba ¿qué le faltó a mis poemas? ¿Qué les falto a mis canciones, a mis
dibujos?¿qué les falto a mis palabras?¿ qué les falto a mis caricias, que les
falto a tus orgasmos?¿qué
le faltó
a mi vida misma, que no fue suficiente para hacerte desistir de tu partida?
Tu aroma es lo que
queda de ti, que ahora en la oscuridad de la noche me acompaña y me arropa el cuerpo frío y desnudo, me rodea, me impregna y
es parte de mí.
Sé que la ausencia otra vez me ha engañado, como siempre, no te puedo dejaratrás.
Armando vega
presente
No sé el camino a recorrer, hoy que no
encuentro tu entender. Provoca un nudo en mi garganta hoy que no se de ti
mujer. De la canción.
Hoy que no sé.
Eduardo Ulloa
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