miércoles, enero 14, 2015

Que las drogas te acompañen






Mucha gente lo pasa por alto o finge demencia, pero el alcohol es una droga muy adictiva, muy fuerte, aceptada ahora socialmente,  inhibidora de la conducta así como del pensamiento crítico.

Hace algunas décadas portar alcohol en una anforita o tratar de comerciarlo o distribuirlo, era causa de cárcel inmediatamente. Para los que recuerden las series policíacas de los 50 recordarán la serie de los intocables, donde los traficantes eran los malos y los súper vilanos.  Personajes como al capone y demás distribuidores de alcohol eran satanizados como el mismísimo Husein o Bin Laden.

En esos tiempos de la prohibición tomar alcohol o venderlo era causa de una gran movilización de medios de comunicación, en cuanto caía un cartel de traficantes, tan parecido a nuestro tiempo, donde ahora mismo traficar con estupefacientes se cae en el mismo juego. En ese entonces el enemigo era quien distribuía esta droga y cualquier policía o militar estaba capacitado para matarlo sin consideración, solo por el hecho de envenenar a la pobre población con su producto maldito (eso fue en tono sarcástico ok).

¿Que son las drogas? Son todas aquellas sustancias que provocan que los sentidos sean estimulados, provocando diferente síntomalogia  dependiendo de la reacción bioquímica que ocasioné. Por lo tanto el amor, la felicidad, la ira, la euforia, el dolor, la gula, son considerados como precursores de sustancias naturales que drogan nuestro cuerpo todo el tiempo. ¿Quiénes son ahora  los malvados y villanos de la historia?¿ a quienes los heroicos policías deberían abatir a tiros en estos caóticos tiempos? pues los vendedores de autos nuevos  por ejemplo, que diseñan olores en autos para drogar el cerebro y crear una necesidad de euforia, al sentir la necesidad de éxito reconocimiento y prestigio o ¿porque no a los vendedores de refrescos de cola? quienes utilizan sustancias secretas que embotan los sentidos con su cantidades grotescas de azúcar.

O a aquellos que crearon toda esa parafernalia de fechas especiales como: 10 de mayo, 14 de febrero, 15 de septiembre en México y demás pretextos para la explotación del pobre y drogado ciudadano, obligando a la persona a entrar en un juego de consumo y compras innecesarias, sólo por el placer dopaminico que otorga la supuesta felicidad y satisfacción de regalar algo a un ser amado. También los guardianes del orden y del deber deberían abatir a tiros, como no, a los infames corredores de distancia maratonistas y demás jonkies drogadictos que corren en busca de esas sustancias que segrega su cuerpo al tener que procesar cantidades tan grandes de oxígeno.


Estamos en un tiempo donde gente se mata y muere por las rutas del narcotráfico. Claro está que las adicciones existen gracias a los adictos y que la responsabilidad de esas muertes y de esas fortunas cae en el consumidor, ya que es el quien patrocina las decapitaciones y demás bonitos espectáculos que ostentan estas organizaciones.

Estamos en tiempos donde aún es una restricción hipócrita y estúpida el tratar de controlar lo que el ser humano quiera meterse en su cuerpo. Como siempre no es el problema que el  ser humano quiere evadirse o maquillar su realidad, el problema es ¿que no le gusta de esta realidad? que tiene o quiere evadirse y escaparse.

Como ya se demostró y fue muy sangrienta la lección, la ley no puede controlar la necesidad de drogas de la sociedad, el ser humano tiene que tener la capacidad y la madurez para controlar o entender sus adicciones, solamente él y nadie más.

Porque si no, entonces el gobierno tendrá mucho trabajo al controlar las necesidades de drogas sociales que inundan el mercado y que son mucho más allá de los estupefacientes conocidos.

Drógate de la vida, que hacer el bien es una droga también, pero con propuesta.

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