Ser crítico con respecto a lo que consumimos, a lo que comemos, a lo que amamos es bueno, porque sólo así podremos ser más objetivos en cuanto a lo que deseamos y en lo que enfocamos nuestra energía y por ende nuestro tiempo.
El punto es que cuando abrimos los ojos a los intrínsecos caminos que forman nuestra sociedad, entendemos los ritos sociales comunes que nos hacen y forman como comunidad.
Mis amigos(cuando tenía) eran los que me tenían dentro de su caja de herramientas como un objeto que podría ser útil y de igual forma yo utilizaba para sentirme en compañía, incluido y amado. Mis amigos eran consumista, se vanagloriaban de sus nuevos bienes obtenidos, de los viajes realizados de las mujeres conquistadas, de los hijos concebidos, de sus maniáticas maneras de aferrarse a la juventud y al bienestar.
Mis amigos disfrutaban de venir a mi casa, criticar mis bienes y discriminarme en base a mis logros económicos, me correspondían con invitaciones para comparar y competir sus propios logros en relación a los míos. Mis amigos eran esos que admiraban mi aguante por beber y la complicidad de engañar a mis novias o la celestinidad de sus propias azañas sexuales. Mis amigos les gustaban los retos y todo era competir, formábamos grupos de espartanos en competencias estupidas de guerreros aburridos, Godínez de trabajo plano burocrático quincenal.
Mis amigos me incluían en sus redes sociales, uno más de cientos de seguidores, amasijos brutos, que festejábamos nuestros viajes de vanidad, selfies de egoísmo, donde la panoplia era "yo" y la torre ifel "yo" y el circo romano" yo" y el Partenón" yo" lanzándome en paracaídas "yo" mírame soy feliz.
Desgraciadamente una vez que se es crítico y se cuestiona lo que es la amistad y lo que esa sagrada palabra representa, es en ese contexto que uno se tiene que quitar de en medio tanta suciedad y contaminación social, con el fin de dejar ese teatro hipócrita, ese baile de máscaras falsas, que nos hacen sonreír por compromiso, asentir por no ser disidente y mentir por diplomacia.
¿Qué pasa entonces cuando le niegas la entrada a tu vida a gente innecesaria, vacía y vana? Sucede que te vuelves exigente para lo que quieres amar y lo que quieres dejar de representar en busca de" Ser" por lo cual también te conviertes en los valores que deseas encontrar en aquello que críticas, por lo mismo eres un ser humano más integral y preocupado, ya no por intereses y bienes propios, si no más bien por el bien común y causas justas y sociales pro activas.
Tengo tan pocos amigos actualmente que ni los dedos de una mano abarca tal cantidad, pero lo que tengo en relación a paz y amor por mi compromiso social es proporcionalmente más rico y basto, que en ese entonces que mi vida social era desbordante. Los amigos que tengo actualmente son comprometidos, son férreos, son hermanos, son humanos que están igualmente comprometidos con su intelecto, como con su salud física.
He dejado de tratar de impresionar a nadie, he dejado de tratar de convencer a nadie, he dejado de aparentar lo que no soy,he dejado de mentir, porque con mis amigos puede mostrarme débil y frágil, sin temor, puedo ser comparsa de soledades y reales alegrías, sin la búsqueda que ambicione nada más que el crecimiento humano conjunto, sin necesidad de utilizar ni ser utilizado por nadie.
Es verdad que al ser más crítico y selectivo con tu medio social este se reducirá a casi 0 pero ¿Acaso eso no es mejor que estar rodeado de mierda, bullicio y soledad disfrazada?
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